La vitamina C es un gran aliado para la salud y siempre lo recordamos cuando hablamos de formas de prevenir resfriados y gripes. De hecho, los beneficios de la vitamina C van mucho más allá de estimular el sistema inmunológico, lo que en sí mismo es una gran ventaja.
Es una vitamina esencial para el organismo, participando en la formación de diversos tejidos de nuestro organismo. De esta forma, la vitamina C es muy importante y actúa directamente en la respuesta del organismo ante la enfermedad, es decir, en la promoción de la curación y el restablecimiento de la salud.
Por toda esta relevancia para la salud de las personas, aquí enumeraremos los principales beneficios de la vitamina C, dónde encontrarla, cuál es la dosis ideal y cómo actúa para nuestra salud. ¡Controlar!
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ToggleDescubierta en 1932 por el bioquímico Albert Szent-Gyöygyi, la vitamina C, también llamada ácido ascórbico, es una vitamina soluble en agua. No es sintetizado por el cuerpo humano, es decir, se obtiene únicamente a través de la ingestión de alimentos y suplementos.
La vitamina C forma parte de la formación de tejidos en el cuerpo humano, como vasos sanguíneos, cartílagos, músculos e incluso huesos, ya que está presente en el colágeno. Además, fortalece el sistema inmunológico y tiene una acción antioxidante, protegiendo las células contra los efectos de los radicales libres, la contaminación y diversas enfermedades.
Cuando los niveles de vitamina C en el cuerpo son bajos, pueden surgir varios problemas. Entre los más comunes, la deficiencia de vitamina C puede provocar:
La vitamina C aporta muchos beneficios al cuerpo humano, muchos estudios prueban estos beneficios y se siguen realizando otros, para entender completamente cómo funciona en el organismo. Enumeremos ahora los beneficios de la vitamina C para la salud, la piel e incluso nuestro estado de ánimo. Ver:
Ya hemos hablado sobre cómo la vitamina C estimula el sistema inmunológico. Aumenta la producción de leucocitos, los conocidos glóbulos blancos, que actúan como defensa del organismo frente a agentes externos y extraños, como virus y bacterias.
Además, aumenta los niveles de anticuerpos cuando el cuerpo desarrolla anticuerpos para combatir un resfriado o una gripe.
Los beneficios de la vitamina C para la piel son numerosos, aportados principalmente por la acción antioxidante que combate los radicales libres. Así, la vitamina C previene el envejecimiento prematuro, marcado por la aparición de líneas de expresión, especialmente en el rostro.
La vitamina C estimula la producción de colágeno, por lo que además de combatir la aparición de arrugas, también devuelve la elasticidad y rejuvenece la piel.
Muchas personas sufren de falta de hierro en el organismo y acaban padeciendo anemia incluso moderada. Sin embargo, no basta con consumir alimentos ricos en hierro como el brócoli, la col rizada y la remolacha.
Para facilitar la absorción del hierro de origen vegetal, la vitamina C es muy eficaz. Así que la próxima vez que prepares una receta casera para combatir la anemia, un poco de jugo de limón será un ingrediente imprescindible.
El beneficio de la vitamina C para los huesos también pasa por la producción de colágeno. El colágeno es una proteína que es la fuerza de los huesos, tendones y vasos sanguíneos. Por tanto, una dieta rica en vitamina C es muy buena para los huesos, así como para el calcio.
Así como la acción de la vitamina E, el zinc y los betacarotenos favorecen la salud ocular, la vitamina C también ayuda a prevenir los problemas de visión que se producen con la edad. Combate la degeneración de la retina y reduce el riesgo de cataratas.
La vitamina C también está relacionada con la lucha contra el estrés. Estudios recientes muestran que puede ayudar a reducir los niveles de cortisol en atletas que complementan la vitamina. Además, los estudios en animales muestran una disminución directa del estrés.
La vitamina C contribuye a la producción de varios neurotransmisores que regulan el estado de ánimo, como la serotonina y la dopamina, mejorando nuestro estado de ánimo y dándonos más energía para la vida diaria.
Ahora que conoces los beneficios de la vitamina C, hablemos de dónde encontrarla y la cantidad ideal para consumir.
Para un hombre adulto, la cantidad diaria recomendada es de 90 miligramos, mientras que las mujeres adultas deben consumir al menos 75 miligramos diarios. Sin embargo, también hay un límite superior de 2.000 miligramos.
Entre las reacciones del exceso de vitamina C se pueden presentar diarrea, náuseas, vómitos, dolor de cabeza e insomnio. Especialmente para aquellos que están considerando tomar suplementos de vitamina C, es esencial consultar a un médico antes de comenzar la suplementación y establecer la dosis adecuada.
En cuanto a los alimentos ricos en vitamina C, podemos mencionar:
El vínculo entre la vitamina C y la lucha contra los resfriados y la gripe es muy popular, pero entendamos cómo sucede. Los beneficios de la vitamina C contra la gripe se basan en su acción antioxidante y en la recuperación de tejidos, es decir, ayuda a la cicatrización del tejido infectado.
Primero, al prevenir resfriados y gripes, la vitamina C fortalece el sistema inmunológico. En buenos niveles, proporciona los nutrientes que el cuerpo necesita para mantenerse saludable y evitar que el cuerpo sufra de baja inmunidad, siendo más susceptible a infecciones virales como la gripe.
Durante un resfriado o incluso la gripe, los estudios han demostrado que buenos niveles de vitamina C en el cuerpo previenen síntomas muy fuertes y también promueven una recuperación más rápida.
Aqui te dejamos nuestra recomendacion de suplementacion de vitamina C de 1.500Mg.